Manuel Alba Leal entró a formar parte del organigrama de Cantera del Real Betis Balompié hace siete años, durante los cuales ha desarrollado siempre su trabajo en la etapa de fútbol formativo. Actualmente ocupa el cargo de entrenador del Alevín A verdiblanco, lo que compagina, además, con el de responsable del departamento de Fútbol-7.

El técnico gerenense ha compartido unos minutos con los medios oficiales del Club en los que, entre otros asuntos, explica en qué consiste el proceso de captación en edades tempranas al tiempo que valora la magnífica participación de su equipo en la pasada Live Football Cup, en la que únicamente el Real Madrid, en la final, pudo batirles.

¿Cómo ha evolucionado el trabajo que se realiza en las canteras de fútbol a nivel general?

- No solo ha evolucionado el trabajo en las canteras de los mejores clubes europeos, sino en la de cualquier equipo de pueblo o barriada sevillana. Los éxitos futuros de los clubes de primer nivel se basarán en la importancia que den a sus canteras en todas las etapas, desde pre-benjamines hasta juveniles, ya que serán las bases de las primeras plantillas. Hace quince años enseñar, entrenar, dirigir jugadores y equipos de fútbol eran casi en su totalidad una actividad voluntariosa. Hoy, por la mayor exigencia y la distinta apreciación de la sociedad hacia el fútbol, se imponen mayores exigencias a los técnicos. En nuestra cantera, año a año vamos dando pasos, poco a poco, para consolidarnos como una de las más fructíferas del fútbol español. El éxito deportivo en fútbol base es un proceso continuo y no una meta concreta que se deba alcanzar. Lo que sí es cierto es que debemos tener una línea marcada, un camino a seguir, para no ir dando saltos adelante y atrás.

Actualmente entrena a una generación que está a punto de dar el ‘salto’ al Fútbol-11. ¿Se prepara a los futbolistas de alguna forma para este cambio?

- Es un salto grande pasar a jugar de Fútbol-7 a Fútbol-11 porque hay distintas porterías, un balón con otro tamaño, un terreno de juego con más espacios que ocupar, esfuerzos diferentes… Pero no debería ser traumático ya que tenemos buenos jugadores y, en pocos meses, los conceptos deben tenerlos asumidos. En Fútbol-7 los chicos van pasando etapas: construir la relación con el balón, desarrollar las nociones espacio-temporales, la presencia de metas u objetivos así como de adversarios y compañeros. En Fútbol-11 se consolida ese aprendizaje previo y se inicia el específico. Si seguimos con la dinámica de tener dos equipos por año en estas primeras etapas, esos aprendizajes previos nos llevarán a tener más jugadores para Fútbol-11, los cuales vendrán ya con esas enseñanzas desarrolladas.

¿Qué particularidades tiene entrenar a niños tan jóvenes?

- Los entrenadores en esta etapa debemos conocer bien a los jóvenes que entrenamos, comprendiendo sus problemas, sus actitudes, motivaciones y percibiendo que la principal razón que les lleva a jugar al fútbol es el placer y la diversión. Somos los padres y el entorno los que intentamos que vayan más rápido. Esta etapa en un club de primer nivel tiene unas características que la hacen especial a la hora de los entrenamientos por varios factores. Primero, porque como he comentado antes, son niños de 7 a 12 años y no futbolistas ya formados. También es cierto que vienen a formarse como jugadores de fútbol en un futuro y no a una escuela de fútbol, por lo que tenemos que exigirles para que aprovechen sus cualidades. Por lo demás, no debemos olvidarnos de que podemos utilizar esta etapa para que sirva como complemento en su formación como personas, de la mano con los estudios.

Los entrenamientos van encaminados a la mejora individual de cada jugador, desarrollando de manera progresiva la rapidez en la percepción del juego y dominio de las habilidades técnicas para la posterior aplicación en el juego. Esta mejora individual repercutirá en la colectiva y, por tanto, en los resultados.

Cuando algún jugador de su equipo comete un error táctico o técnico, ¿cómo se trata el tema durante la semana?

- Los errores lo aprovechamos para crecer. Un error o una derrota en esta etapa no es otra cosa que una enseñanza, el primer paso hacia algo mejor. Cuando entrenamos les ponemos problemas para que ellos busquen soluciones, así favorecemos sus mecanismos perceptivos de la toma de decisión y ejecución. El camino del éxito está lleno de fracasos y errores.

Su departamento se encarga del seguimiento de jugadores en la edad que va desde los 7 a los 12 años. ¿Podría explicar cómo se realiza el proceso de captación?

- Es un proceso fundamental.  Vamos seleccionando jugadores con talento que, a corto plazo y mediante un proceso formativo cualificado, tengan opciones de ser jugadores profesionales. Es una etapa primordial por dos aspectos, están en sus primeros pasos como futbolistas y tenemos tiempo para que ese proceso formativo cualificado vaya modelándolos. Aunque habrá jugadores que no lleguen a las etapas finales, como ocurre cuando se capta un joven en juveniles, indudablemente tendremos más opciones para acertar.

El proceso de captación es arduo porque compartimos ciudad con otra cantera importante, aunque nosotros utilizamos nuestros puntos fuertes para poder incorporar a jóvenes talentos. En cuanto a lo que es en sí este proceso, primero establecemos unos criterios de selección analizando nuestras plantillas y observando las ligas locales, provinciales y regionales. Posteriormente seguimos a aquellos jugadores que mejoren lo que ya tenemos y, por último, seleccionamos a los que creemos que, después de un proceso formativo, pueden ser jugadores profesionales. Esta tarea la llevamos a cabo con el trabajo de nuestros entrenadores y colaboradores de confianza. Semana a semana vemos muchos partidos y analizamos entre todos qué es lo mejor para nuestras plantillas.

¿Qué cualidades se buscan en estos futbolistas? ¿Se piensa ya en sus posibilidades de llegar a la élite?

- Como he comentado anteriormente, seguimos unos criterios pero lo fundamental es que sean felices con entrenar en el Real Betis, que disfruten. Pero deben saber que no es fácil, que solo con el talento no vale. El esfuerzo es fundamental porque muchos quedan en el camino y no llegan a la élite. Buscamos características como la compresión del juego, la velocidad, actitud o la técnica.

Hace pocas fechas su equipo se proclamó subcampeón del Live Football Cup tras perder en la final contra el Real Madrid. ¿Qué valoración podría hacernos sobre la trayectoria en este torneo?

- Hicimos una primera fase, cuartos y semifinal muy buena, no encajamos ningún gol en contra y realizamos un juego muy elaborado. Contra el Real Madrid competimos de tú a tú con jugadores de muy buen nivel, entre ellos el hijo de Zinedine Zidane. Pero, además, el Benjamín A se proclamó recientemente campeón del torneo de San Fernando, el Pre-benjamín hizo lo propio con el Mundialito disputado en el Estadio de La Cartuja, el Benjamín B en Estepona y el Benjamín D fue campeón de un grupo donde estaba el Recreativo de Huelva Benjamín B. Con todo, insisto, el éxito en fútbol base es un proceso continuo, no una meta.