El Real Betis empata en su último partido de la fase de grupo y se clasifica como segundo (0-0)
Puesta de largo de Juan Carlos Garrido en el Benito Villamarín tras su victoria en Copa del Rey. Con un juego con protagonismo de la pelota, con entradas por banda y con presión arriba arrancaba el conjunto verdiblanco el partido y lograba en los primeros minutos encerrar a los croatas disfrutando de buenas jugadas sobre todo por la banda izquierda. Anunciaba las intenciones de los verdiblancos Juanfran con un tiro con su pierna zurda que Vargíc despejaba a córner. El control era bético y las ocasiones también. Salva no acierta a rematar a gol un balón que se le quedaba muerto en el área cuando la grada se disponía a cantar el primero. Estaba consiguiendo llevar a su terreno todas las acciones del partido. Las contras del Rijeka no se sucedían y las ayudas eran precisas. Lolo se anclaba en el centro del campo y se hacía fuerte en el robo de balón. Garrido decidió mover las bandas y Juanfran empezaba a hacer daño desde su nueva ubicación. En el costado izquierdo el madrileño se movía mejor, desequilibraba en velocidad y centraba aunque la precisión no era la adecuada para marcar. Aún así, Chuli pudo hacer el primero en un pase del extremo. El Rijeka no hacia un gran fútbol, incluso sufría en las transiciones de banda a banda pero Benko pudo adelantar a los suyos. Clarísimo el remate de cabeza, completamente sólo en el área, pero se marchó por la derecha de Sara. Sin ningún juego, tuvieron la más clara hasta el momento. El Betis supo reponerse. Disfrutó de nuevas ocasiones, como la que tuvo Salva a pase de Steinhöfer y que Males mando a córner. Pero de nuevo el Rijeka pudo adelantarse con una jugada aún más clara que la anterior. krstanovi? no logra controlar cuando ya iba a encarar en el mano a mamo a Sara. Con esta acción el partido se iba al descanso, con buenas sensaciones pero con dos sustos importantes. En los primeros minutos de la segunda quien intentó asustar fue el Betis, y casi logra su objetivo. Asedio la meta croata con hasta cuatro centros consecutivos pero sin premio. La ideas seguían intactas pero Garrido se vio obligado a mover el banquillo. Xavi se marchaba lesionado en el minuto nueve y Rubén debutaba en la competición. El técnico valenciano se mostraba valiente y plantaba un 4-4-2, retrasando la posición de Salva Sevilla. Le costó aclimatarse a la nueva disposición aunque tampoco pasaba apuros atrás. Gozaba de llegadas, no de ocasiones y empezaron a tener algunas imprecisiones en el centro del campo que dificultaban las subidas de balones a los atacantes. Cuando el partido decaía, Chuli tuvo una clamorosa oportunidad. Él mismo robaba la pelota pero en la definición, solo con el portero, la mandaba fuera. No le gustaba a Garrido la pérdida de presencia en el centro del campo y cambió. Nono y Verdú salieron por Chuli y Salva. Rubén se quedaba como único referente en ataque. La aclimatación costaba y el Rijeka lo aprovechaba en las contras. Zoran silenció al Villamarín cuando su disparo cruzado se perdía rozando el palo de Sara. Las cosas no le salían al Betis y comenzaba el nerviosismo en forma de precipitaciones. Se conseguía llevar el esférico a banda pero los centros morían chocados en las piernas o cabezas de los defensa del Rijeka. Como prueba de ello, los innumerables córner botados. Se esfumaron los minutos con las mismas acciones y concluía el encuentro. Real Betis que se clasificaba para dieciseisavos de final de la UEFA Europa League como segunda de grupo.