Rubén y Molina buscan pulverizar sus mejores marcas
Son muchas las palabras con las que se pueden definir las actuaciones que están protagonizando Rubén y Molina, Molina y Rubén. Excelso, superior, célebre o egregio son algunos vocablos a los que podemos recurrir si queremos describirlo desde una perspectiva más formal. Bestial o brutal, si nos vamos al lenguaje utilizado por los jóvenes. Pero sin duda alguna, la mejor descripción viene expresada por el lenguaje gestual, el movimiento que realiza cualquier aficionado del Real Betis cuando uno de los dos marca y se lleva las manos a la cabeza esbozando una sonrisa en su cara, porque son una barbaridad de goles. El canario es el Pichichi de la categoría con 26 goles y el de Alcoy es el mejor goleador de la segunda vuelta del campeonato. Goles que sirven para consolidar al Real Betis en los más alto de la tabla pero que tienen historias diferentes.
Para Rubén, la campaña ha discurrido en una línea constante exceptuando una pequeña racha que hizo que el canario no anotase. Superada esta sequía, el ‘24’ verdiblanco ya está a un gol de alcanzar su mejor marca como bético en Liga, 27 tantos. El delantero se marcó varios retos a principio de campaña y está en buena senda para lograrlos: ascender, ser Pichichi y además superar los goles anotados en su primer año. Rubén Castro nunca menciona una cifra de goles a principio de cada Liga y tiene un lema interior: marcar un gol más que la temporada anterior.
La temporada no empezó de la misma forma para uno que para otro. Molina ha explotado en la segunda mitad de la Liga y para nada se imaginaba estar en la cifra goleadora en la que se encuentra. A base de esfuerzo, tesón y calidad, el ‘19’ tiene también la posibilidad de batir su mejor marca en Liga con el Real Betis. Como Rubén, la consiguió en su primer año en Heliópolis. En esa campaña acumuló 18 goles, en esta lleva 16 y tiene cinco partidos por delante para lograrlo y la trayectoria que dibuja hace augurar que se agenciará la cantidad de goles que requiere para ello.
Dos registros que están a punto de caer por la constancias y las ganas de meter goles de dos delanteros que no se cansan de hacerlo. Viven su mejor momento y persiguen superarse a sí mismo para devolver al Real Betis a Primera división.